¿ Cómo te implicas en el entorno? 

 

 

El post de hoy trata de explicar la necesidad de implicarnos en nuestro entorno para llevar una mejor convivencia en el trabajo, con los amigos y con nosotros mismos.

Implicarse significa sacar al exterior una acción interna que provoca una reacción en todo lo que está a su alcance.

Nosotros diseñamos nuestra realidad cuando enlazamos experiencias y deducimos una respuesta o acción ante ellas; por ejemplo cuando hacemos una pregunta esperamos una respuesta.

Actualmente se habla de engament o compromiso para referirse a técnicas de marketing, aunque la implicación está en todas partes.

• Implicarse en el trabajo

Veamos un ejemplo: En una oficina hay una punta importante de trabajo que entregar. Corresponde al grupo administrativo entregarlo, pero los tiempos se vienen encima y con el personal que realiza esta actividad, se entiende que, no habrá tiempo real para acabar el trabajo en la fecha acordada. Desde gerencia se propone que todas aquellas personas que trabajan en la oficina, sea cual sea su rango y especialidad puedan colaborar extraordinariamente para que hagan la actividad urgente.

– ¿ Aceptar colaborar en algo que “no te toca directamente” es implicarse?

– Creo que sí.

He tenido la suerte de experimentar esta situación y ver como todo el mundo se une para trabajar en una causa común. Resulta impresionante y bello.

Podíamos haber dado por supuesto que no participaría todo el mundo de la actividad, y nos hubiéramos equivocado, en cambio sucedió de esa forma porque el clima del conjunto es el óptimo. Conclusión: Ante la necesidad individual de una parte del equipo, el conocimiento del problema provoca una acción admirable en el grupo.

• Implicarse con los amigos

Cuando una persona amiga muy cercana te explica un problema que le hace sufrir, lo más directo sería decirle dónde está el error que le causa esta angustia. Si la respuesta fuera tan fácil ya no habrían tantos problemas en el mundo y seguramente no tendríamos tantas personas a quien decir esto sí está bien y esto no. Si te implicas con su causa intentas no dañar su persona, su acción o su idea a pesar que desde tu perspectiva creas que su actitud no le va a ayudar. Intentaremos conducir su argumentación hasta el punto crítico donde perciba que quizás lo que parecía tan claro y transparente ya no es así.

• Implicarse con nosotros mismos

En este apartado quiero resaltar que la implicación con uno mismo supone ser fiel a tus principios e ideales. Está bien ayudar a los demás pero no olvidemos que nosotros también nos debemos cuidar.

En ciertas ocasiones el peor enemigo de alguien es uno mismo.

#PasionConTinta

 

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