Mar de día,

mar de noche.

En calma.

Mar brava.

La fotografía que da inicio a este post es una imagen de la Cala del Pi en Platja d’Aro, Girona. La gran Costa Brava. Utilizo esta preciosa imagen para representar momentos puntuales de nuestra vida.

• Luz que destaca de la oscuridad,
• belleza,
• inmensidad,
• obertura al infinito,
• localización,
• calma,
• conjunto,
• integridad,
• detalle y
• armonía pueden ser algunas de las características que evoca este paisaje.

Personalmente a mi me aporta cada una de ellas y coinciden con el momento dulce y personal que estoy viviendo.

Hoy, os dejo una reflexión a modo de

poema

 

Con mi espíritu en calma pero guiado por la luz del camino

avanzo hacia la inmensidad presente rodeada de naturalidad y belleza

para nadar en un mar acogedor que pacientemente espera mi aportación.

Moviéndome y nadando con sabiduría conseguiré llegar a buen puerto.

Detrás quedaron las turbulencias profesionales.

Seguiré mejorando en cada intento.

Soltaré amarras,

me guiaré por el viento

pues las aguas traen

y las aguas llevan.

 

 

 

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