En otoño las playas recuperan la paz natural. Han quedado atrás los días de calor, el verano y las multitudes que acuden a la playa a cualquier hora del día.
¿Te atrae un paisaje como este? O por el contrario, ¿Prefieres el de los días de calor?
Las temperaturas bajan en otoño y apetece tomar algo caliente ¿Un chocolate deshecho, quizás?
Si unimos el mensaje de las dos fotografías anteriores podemos crear una sinergia otoñal que da nombre a este post ¿Atracción o deseo?. La pregunta es trasladable a las personas.
Podemos definir atracción como la acción capaz de captar nuestra atención o interés y que acaba despertando en nuestro ser simpatía hacia quien o qué se siente atraído; en este estado tienen mención:
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Sentirse atraído por el éxito,
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Por el conocimiento,
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Por temas especiales como, por ejemplo, la física,
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Por los sentimientos como el amor,
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Por el sentimiento de abundancia o paz interior…
Y también por los sentimientos opuestos como sentirse atraído por lo difícil o prohibido.
Si nos centramos en el significado de la palabra desear hablaremos de aquellas cosas que nos gustan y que junto a nuestra manera de ser y/o pensar nos enriquecen con valores positivos.
Ya lo dice el refrán:
Las cosas claras y el chocolate espeso”
pues de esta manera sabrás si al contactar con tus deseos, éstos te aportan y transmiten una cálida emoción.